Ser puta
Le gusta bailar. A ella no se le cumplieron los sueños. Se limita a fingir que es una estrella en los bares llenos de humo. Cuando nadie lo espera, despliega su coreografía excéntrica y salida de tono, cierra los ojos, abre los brazos y se deja llevar.
Tiene una risa contagiosa que sólo se turba cuando ve un objetivo. No lo puede evitar, los percibe, los huele.
Le gustan las fiestas de pijamas con chicas lesbianas. Es más niña que yo.
Le importa la felicidad de los demás. Está empezando a quererse.
Sandra, déjalo ya.
4 comentarios
abejita -
gurb -
es muy fuerte que a uno le segen la estima personal.
minaya -
sonia -