Cosas de la globalización
Hace unos meses trajeron a mi casa un objeto nuevo, al que no di importancia, y que pasó a ocupar un espacio en todo el escenario kitsch que conforman nuestras estanterías, junto al vinilo “Horses” de Patti Smith, una bola de discoteca, diversos jarrones de cristal azul cobalto, estatuillas de peces tropicales, una lámina sin colgar en la que aparece un pentagrama con ojos, y una familia de cerditos chinos dorados. El nuevo objeto era una figura dorada de un gato chino con la pata levantada, de la misma estética que los cerditos. Me dijeron que servía para atraer no sé qué, pero se me olvidó, ya que en mi casa hay más de un objeto con finalidad supersticiosa (destaca el sapo de medio metro, dorado y con ojos rojos de cristal, en el baño).

Posteriormente vi el mismo modelo de gato en diversos comercios chinos de Lavapiés.
Me hizo gracia cuando volví a ver uno igual, éste más grande, en un kiosko de chucherías que hay en la Gran Vía, cerca de Callao, y entonces ya constaté que era más popular de lo que yo pensaba. El gatito en cuestión tiene la pata articulada y, alimentada a pilas, saluda a todos los viandantes, provocando incluso que se detengan a observarlo.
Cuando llegué a San Francisco, me sorprendió comprobar la presencia del famoso gato por doquier, en las tiendas de Chinatown sin excepción, y a la venta en todas sus modalidades, en diversos colores, materiales y tamaños, solos y en familia. Pero no sólo en los comercios orientales (que son muchos) lo pude observar, sino en los occidentales, en supermercados, restaurantes, kioscos, puestos de souvenirs y hasta en tiendas de ropa. Su presencia era mayor que en Madrid, y entre bromas, llegamos a la conclusión de que se había instaurado un nuevo culto al gato de la pata levantada, impulsado por la globalización, pero curiosamente no por los medios de comunicación, ni siquiera por internet, y qué tendría el dichoso gato que a todos cae simpático, tanto que de hecho hay mucha gente que se lo compra incluso sin saber lo que significa. Y esto me dio que pensar, apoyando la teoría de Gurb… ¿no será parte del plan de los gatos por dominar el mundo? O quizá más probablemente, ¿no será muestra del poder de la economía china, y tras ella, de las costumbres de sus comerciantes?
Cuál no fue mi sorpresa ayer, aquí en México, comiendo en un restaurante de comida japonesa fusión con mexicana (sí, existe y es la bomba), cuando vuelvo la vista hacia un mostrador y observo al famoso gatito, casi mirándome. Constatado, el gato está en todas partes, y mira que la figurita es horterilla, pues nada, ha triunfado, quita tú el bote de Ikea.
Total, me ha picado la curiosidad y he decidido entrar en internet para averiguar del gato.
Resulta que el gato tiene nombre, se llama Maneki Neko y su traducción es "gato que da la bienvenida", pero también es conocido como "gato de la suerte" o "gato de la fortuna", y donde más se usa es en los comercios para atraer visitantes/dinero, por lo que deduzco que viene a ser una especie de San Pancracio a lo oriental.
El origen es japonés, pero está muy extendido en China. Tiene su leyenda y todo.
Luego me entero que su significado varía según el color o la pata que levante:
- Pata derecha levantada: llama al dinero y la buena fortuna
- Pata izquierda levantada: llama a los clientes o visitantes
- Ambas patas levantadas: protección para la casa
Hay dos versiones, en la americana no se llama Maneki Neko, sino "Dollar Cat", y la diferencia es que el Maneki Neko japonés saluda con su palma mirando hacia abajo mientras que el "Dollar Cat" tiene la palma mirando hacia arriba.
- El más popular en China es el de color dorado, que llama al dinero.
- El tradicional es tricolor (blanco, rojo y amarillo) y da buena suerte, especialmente para viajar.
- El de color negro: aleja los malos espíritus
- El rojo: contra las enfermedades
- El blanco: pureza, se encarga de atraer las buenas energías y felicidad
- El rosa: atrae el amor
- El verde: para logros académicos
Todo un mundo, el que rodea al Maneki Neko.
Y ahora me pregunto: ¿será moda o tendremos gato hasta el fin de nuestros días?
22 comentarios
marcos a cedeño -
Iwi -
Salarino -
gurb -
iwi, gustazo post (el de arriba, comento aca, asi optimizo espacio) sobre la Diane Arbus. Me ha molado siempre y hace poco tuve de suerte de poder ver su obra original en el CaixaForum (los de la Caixa son los que manejan mas de estas expos wapas, traen un montón de obra de fotografos 'clasicos' y contemporaneos).
De las primeras en retratar sociedad 'freak'. Se lo curraba mogollon. y tiene una serie muy curiosa, de campos nudistas americanos en los años 60. una pasada. Me gusta mucho.
Iwi -
Brixta -
Mi religión me impide aceptar regalos. Los que me dan suelen acabar en la cabeza del incauto que los da. ;)
Iwi -
Iwi -
Iwi -
Amos, o me lo parece a mí.
Un secreto: uno de los factores fundamentales que hizo que me decidiese a quedarme en esa casa, casi sin apenas conocer a mis compañeros, fue el hecho de que ese vinilo se encontraba allí en un lugar de honor.
Brixta -
malayerba -
Iwi -
Anna, gracias, lo que pasa es que me cansado un poquito de viajar y estoy haciendo un descansito, por lo que paro a crónicas por unos días, pero luego las retomaré, eso dalo por seguro.
Maco, y Salarino, y Gurb: sí sí, el gato tiene su cosa, y Karra: acaba enganchando, ya verás que al final te gustará y todo.
(Creo que me he convertido en progato total)
Gurb, viniendo de ti es todo un halago (lo de la foto, digo). Era un día de esos muy nublados pero que de los huecos que hay entre las nubes salen unos rayos de sol potentísimos y espectaculares. Me acordé de ti, tú le hubieras sacado mucho partido. También me acordé de la Mala. San francisco tiene contrastes muy interesantes en general, creo que le gustaría a cualquier fotógrafo.
gurb -
gurb -
Estoy por provar a meter billetes entre el pienso del Marius, como haciendo el mismo ritual pero en blan biologico.
El lobby felino ya esta aqui. Cuidate mucho y disfruta mogollón. Muchos abrazos.
Persevera Porculera -
http://www.espacioblog.com/elguionistahastiado
karraxi -
pero en fín, la gente esta mu-mal
Salarino -
macorina -
Anna -
Casi que me busco la suerte yo sola, je.
Por cierto, quería felicitarte por tu viaje y por tus crónicas, me parecen fantásticas. Casi prefiero que no vuelvas para que sigas contándonos cosas :-)
Iwi -
malayerba -
Brixta -